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La Gran Invocación

¡Las fuerzas de la luz iluminan a la Humanidad!

El Espíritu de la Paz se difunde por el mundo.

El Espíritu de colaboración une a los seres humanos de

buena voluntad, donde quiera que estén.

El olvido de agravios, el perdón, es la tónica de ésta época.

El poder acompaña los esfuerzos de los grandes seres.

Y cumplimos nuestra parte i Así es!

 

Surja el Cristo de la Liberación.

Trae ayuda a los hijos de los de los seres humanos.

Aparece la verdad, y su venida, salva.

Las almas de los todos los seres despiertan a la luz.

Permanecen en ella

El Señor se pronuncia:

¡Llega a su fin el dolor!

Vez, Oh Todopoderoso. ¡Profundo Amor!

Llegó, para la fuerza salvadora, la hora de servir.

Se difunde por el mundo, ¡Oh Todopoderoso!

La Luz, el Amor y el Poder cumplen el propósito de Aquel que viene.

 

La Voluntad de salvar está presente.

El amor para llevar a cabo la misión, está presente.

La ayuda activa de quienes conocen la verdad también está presente.

Ven, oh Todopoderoso, y fusiona a los tres. Construye una muralla protectora.

El Hambre y la injusticia terminan ahora.

 

Desde el punto de la Luz en la mente de Dios, afluye

Luz a la mente de los hombres, la luz desciende a la tierra.

 

Desde el punto de amor en el corazón de Dios, afluye

Amor a los corazones de los seres humanos, Cristo retorna a la Tierra.

 

Desde el centro donde la voluntad de Dios es conocida,

El propósito guía las pequeñas voluntades de los seres humanos,

El propósito que el Maestro conoce y sirve.

 

Desde el centro que llamamos la raza humana.

Se realiza el Plan de Amor y de Luz,

y se sella la puerta donde se halla el mal.

La Luz, el Amor y el poder restablecen el Plan Divino en la Tierra.

Y ASÍ ES.

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