Dr. José Luis Pérez-Albela
Médico cirujano / Médico naturista
Los minerales son nutrientes imprescindibles para que nuestro cuerpo realice un buen metabolismo. Permiten la elaboración de tejidos y la síntesis de hormonas, e intervienen en las reacciones químicas junto con las enzimas. Nuestro cuerpo no los fabrica. Por eso debemos obtenerlos a través de los alimentos, de la respiración, y también absorberlos a través de la piel. Recuerda que para aprovecharlos adecuadamente es importante seguir una dieta equilibrada.
MACROELEMENTOS
Los macroelementos o macrominerales son aquellos que necesitamos en mayores cantidades. Entre ellos: sodio, calcio, cloro, potasio, fósforo y magnesio.
OLIGOELEMENTOS
Los oligoelementos o microminerales son los elementos que requerimos en menor cantidad: hierro, yodo, flúor, zinc, cromo, selenio, manganeso, molibdeno y cobre.
ALIMENTOS QUE CONTIENEN MINERALES
Zinc, cobre, magnesio
Cereales como el arroz, maíz, cañihua, trigo, quinua, kiwicha.
Zinc
Legumbres o menestras como lentejas, frejoles, pallares, alverjas, garbanzos.
Potasio
Plátano, naranja, tomate, levadura de cerveza, frutos secos, cacao.
Azufre
Crucíferas (berros, col, coliflor, brócoli), legumbres.
Fósforo
Maca, almendras, semillas de girasol, trigo, arroz integral, salvado de trigo.
MINERALES CONTAMINANTES
Son aquellos que intoxican nuestro organismo. Entre ellos: mercurio, aluminio, plomo, arsénico y litio. La intoxicación para por estos minerales se debe, en la mayoría de los casos, a factores medioambientales.
OLIGOTERAPIA
En las últimas décadas, los suelos usados para la agricultura han disminuido su contenido en minerales, por lo cual los alimentos no contienen las cantidades suficientes de estos elementos y se debe complementar la dieta con suplementos adicionales. Esta práctica es conocida en la medicina natural como oligoterapia.
BENEFICIOS DEL MAGNESIO
Es uno de los minerales que más necesitamos ya que contribuye al buen funcionamiento de todas las células de nuestro organismo. En la actualidad, hay muchos estudios sobre sus propiedades preventivas y curativas. A continuación, detallamos algunas de ellas:
Fuentes de magnesio
Entre los alimentos ricos en magnesio tenemos los frutos secos, las pecanas, las castañas, el germen de trigo, las nueces, el ajonjolí, el cacao, la avena, la achicoria, el cochayuyo, las alcachofas y los berros.